martes, 11 de marzo de 2008

Candela

Para Roberto

Candela se sienta por fin. Después de todo el día respira hondo y piensa que necesita las vacaciones como si de una bendición se tratase. Deja su menta en blanco y valora el día, y piensa...

Domingo pintó una raya con sus creyones y quiso ver,
y vio cuanto quiso y luego pintó más rayas en la pared.
Domingo pintó una casa con una fuente y se fue a beber,
y el agua eran muchas rayas de un sol de rayas en el papel.

Y vio una serpiente durmiendo a un dragón,
y vio mil ciudades en su corazón.
Y vio una jirafa cayendo en la red,
del oso de azúcar y un río de pie.

Elena pintó la lluvia lloviendo lenta sobre el papel,
y vio cuanto quiso y luego pintó más lluvias en la pared.
Elena pintó la lluvia con cuatro rayas color de flan,
y luego pintó tambores con otras rayas y mucho más.

Y vio una muchacha bailando en el mar,
los ojos bañados de profundidad.
Y vio una sonrisa de musgo y color,
y un líquen que nace de su corazón.

Cuando quieras ver verás, todo lo que imaginaste.
Cuanto quieras ver verás, todo aquello que soñaste.

María pintó una raya sobre la raya que otro pintó,
y dijo que era una foca bailando al ritmo de una ilusión.
Y vio a Blancanieves morena de piel,
y el bosque encantado y la abeja en la miel.

Cuando quieras ver verás, todo lo que imaginaste.
Cuanto quieras ver verás, todo aquello que soñaste.

Las cosas que hemos vivido ya nunca fueron más lo que son,
las cosas son como rayas y cada uno vio lo que vio.
Las cosas que hemos vivido ya nunca fueron más lo que son,
las cosas son como rayas y cada uno vio lo que vio.

Cuando quieras ver verás, todo lo que imaginaste.
Cuanto quieras ver verás, todo aquello que soñaste.
Cuando quieras ver verás, todo lo que imaginaste.
Cuanto quieras ver verás, todo aquello que soñaste.

Gracias por tu post, Roberto. Este es mi regalo por acordarte de mí.

lunes, 10 de marzo de 2008

Aldebodal. 2ª Parte

Shicrap es el continente mayor de los dos existentes en Aldebodal. Se encuentra dividido en siete regiones, una de ellas central desde la cual nacen las otras seis. La Región central es tan solo una gran ciudad, o más bien una ciudadela sobre un Monte, el Monte Daymantos, en el que brota un manantial de aguas blancas, el Manantial Sirhi Okra. Contaban algunos botany ancestrales, que tras crear el planeta, la Tierna Madre Aldebodal se sentó en dicho Monte para observar su obra, y para saciar su sed y su fatiga, hizo brotar el blanquecino líquido. Este agua se da de beber a todos los botany recién nacidos, y con él se crían en los primeros años de vida. La familia de la Emperatriz lo entrega libremente a todas las familias con un nuevo miembro, ya que siempre han considerado el Manatial patrimonio de todos los botany, así como de cualquier habitante de Aldebodal que lo requiera. El nutritivo elemento, también se concede a enfermos físicos y psiquicos, aunque no siempre cura o proporciona la salud que se le pretende.

Esta ciudadela es la residencia de la Familia de la Emperatriz, donde la elegida como Soberana Botany de las Tierras de Aldebodal, recibe en audiencia y vigila por el bienestar de sus iguales y de todo aquel que se lo pida.
Es una cuidad toda cristalina. El Palacio Imperial, las casas, los puentes, las torres de vigilancia, incluso el suelo es cristalino, y por él se puede ver cómo corre el Manantial, haciéndola parecer más limpia y pura. Este efecto se consigue utilizando un tipo de roca preciosa pulida, llamada key. Esta roca se extrae en la Región de Sojor, de la que hablaremos más adelante, donde los botany de piel rojiza la tratan y consiguen liberar de su cárcel oscura y fea, para crear un cristal precioso.

En esta ciudadela, también viven los representantes de las distintas Familias, encargados de consensuar las decisiones sobre el futuro de los botany en asamblea con la Empertariz. Igualmente habitan esta región central sabios, embajadores de otros pueblos y especies, arquitectos, pintores, poetas, actores, trabajadores de palacio, burócratas, maestros, y niños, muchos niños. Hay albergues en los que se acoge a las familias que acaban de recibir el regalo de un pequeño botany, para que puedan alimentar durante los primeros años al bebé. A lo largo de este tiempo, se les busca trabajo en el Monte Daymantos, y se procura su manutención, así como la educación del resto de sus descendientes. Una vez que el pequeño comienza a rechazar el blanco fluido y prefiere los alimentos sólidos, la familia firma un acuerdo con la Emperatriz, en el que se les asegura, que si su hogar de origen ha percibido algún daño durante su ausencia, la Familia Imperial se compromete, al completo, a ayudarles en la reparación de la misma.

La ciudadela del Monte Daymantos es una de las ciudades y regiones más prósperas de todo Aldebodal...