viernes, 7 de noviembre de 2008

Aldebodal 5ª Parte

El último de los edificios emblemáticos de la ciudadela es La Casa del Manantial, o como suelen llamarlo los botany, El Hogar.

En el Monte Daymantos se encuentra el Manantial del que, por sucesivas separaciones, afluentes e irregularidades del terreno, surgen los seis grandes ríos del planeta: Edrev, Luça, Od - Ärom, Ojor, Ajnaran, Ollirhama; que a su vez dan nombre a las seis Regiones de Aldebodal.

Las crías de los botany deben ser amamantadas durante los primeros años de su vida con el agua de este manantial, pues posee todos los nutrientes necesarios para el desarrollo y la correcta alimentación de los pequeños. Los ríos de Aldebodal no son igual de beneficiosos, ya que en su trayecto van perdiendo unas facultades nutritivas, así como ganando otras, que pueden hacer que el infante crezca, pero no tan saludable.

Justo en el lugar en el que brota el manantial, la Familia de la Emperatriz,  años oxiales atrás, levantó un edificio para protegerlo de las condiciones meteorológicas, y dar cobijo a quienes se acercaban al Nacimiento de los Ríos a por el nutritivo líquido para sus bástagos. Al principio, era una construcción realmente pequeña sobre el manantial, pero los botany también fueron creciendo, aumentando, evolucionando, y aquella quedó estrecha e inútil, por lo que se fueron haciendo múltiples ampliaciones. La última reforma se hizo durante el apacible gobierno de la Emperatriz Yugova, quien pidió opinión a los habitantes del Monte, y levantó un edificio muy amplio, que no megalítico, con un gran patio, similar a un claustro, en cuyo centro se encontraba situada la Casa del Manantial, recibiendo la luz de Osex durante día, así como los pálidos rayos de las lunas en la noche, o las frías caricias de la lluvia, en un precioso jardín, con hierba de los seis colores que representan las seis regiones del planeta. Este es el aspecto que en la actualidad conserva La Casa.

Este Hogar lo regentan en colaboración las Familias del Inicio y de la Emperatriz, siendo miembros especializados en la crianza, alimentación, educación y medicina, quienes atienden a todas las familias que hasta allí se acercan. Como ya explicamos anteriormente, estas familias dejan sus hogares y acuden a la ciudadela del Monte Daymantos, donde se les da asilo y cobijo en albergues, estos sí regentados en exclusiva por la Familia Botany. Así lo decidieron el resto de Familias, ya que es una costumbre muy arraigada para su especie, incluso la única de todo el planeta que depende tanto de este agua. De este modo concluyeron, que sólo la Familia que estudiaba y centraba su atención en su propia especie podía cuidar y acoger adecuadamente a las familias en esta situación.

La Casa del Manantial se encuentra abierta día y noche, y de igual forma para todas las especies de Aldebodal. Inteligentes, salvajes, voladoras o reptantes, los botany tan sólo pretenden proteger el nacimiento de sus ríos y mantenerlo conservado el mayor tiempo posible. Del mismo modo, según quedó recogido en el Libro de Convivencia de los Botany: "Este fluido no puede ser vendido, ni debe ser objeto de comercio. Es un regalo de la Madre Aldebodal y como tal debe ser tomado."

De este modo, todos los núcleos familiares botany pasan entre uno y tres años en la ciudadela del Monte Daymantos, lo que la hace una ciudad muy rica cultural, artística y económicamente, al igual que la convierte en una ciudad abierta a todo visitante botany o no. Un lugar brillante, amable, apacble y acogedor, que cada botany siente como su hogar, ya que todos nacen allí y allí anhelan algún día volver, para recibir y criar a sus hijos e hijas.