
Yo ya conocía a estos personajes, pues hace un par de navidades vino a vivir conmigo otro, al que hasta ahora solía llamar Vader (ya que iba vestido como Darth Vader). No solíamos tener mucha relación, él habitaba el salón, nos saludábamos de vez en cuando, sobre todo cuando limpiaba esta estancia de la casa, y poco más.
Pero cual fue mi sorpresa, cuando al llegar el nuevo inquilino, se quitó la máscara, bajó su espada laser, se colocó una nariz roja y se acercó dócilmente.
Nuestro nuevo amigo se llama Mambo, y ayer descubrí que Vader en realidad se llama Wasabi. Mambo le ha regalado a Wasabi una pequeña flor que llevaba en su marsupio trasero, entre todas las fichas que venían en su maletín potato de cuarenta piezas. Wasabi está encantado, ya que su nuevo amigo lo segundo que ha hecho ha sido repartir sus partes con él. Ahora no sólo podrá vestir de Darth Vader, sino que podrá sonreir como a él le gusta, poner ojos interesantes a la gente cuando pasa, o quitarse los zapatos e ir descalzo.
Ayer fue un gran día para Mambo, para Wasabi y para mí.
2 comentarios:
Jajaja..Me encanto!... Un saludo a Manbo y otro como no a Wasabi...
Mil besos..
Ala!! ¡Qué chulo es Mambo! A ver si un día quedamos todos y nos conocemos.
¿Me quedaría bien ese bigote?mmm.
Un besazo, jacobo
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